Productor de vino y presidente del Grupo Hacienda Encinillas
Eloy S. Vallina Lagüera, fue un empresario destacado que ha incursiono exitosamente en la producción de vino en México.
Actualmente era el CEO de Grupo Chihuahua (son la siglas para el término en inglés «Chief Executive Officer» que se traduce al español como «Director Ejecutivo» y se usa para hacer referencia a la persona que ocupa el puesto directivo más alto en la jerarquía de una organización), además de Presidente de Hacienda Encinillas, vinos que son un referente del potencial vitivinícola de Chihuahua.
La Hacienda Encinillas es propiedad de Eloy Vallina Lagüera desde 1993, misma que perteneció a Luis Terrazas, uno de los mayores terratenientes durante la época del Porfiriato. Eloy Vallina ha dedicado su trabajo en esta tierra desde 2004, cuando sembraron su primera vid, para perseguir su sueño de convertirse en uno de los productores de vino más importantes del país.
En su sueño de convertirse en productor de vino, Eloy tuvo el respaldo de sus hijas, Zonia y Lorena, con quienes ha trabajado hombro a hombro. Ambas hijas buscaron a los mejores enólogos del mundo para convertir a Encinillas en una bodega de renombre internacional.
«Esta hacienda es uno de mis lugares preferidos. Aquí es donde la familia se reúne periódicamente, donde mi hijo se casó y donde hemos bautizado a algunos de mis nietos» decia Don Eloy.
Con solo 22 años, Eloy se convirtió en la cabeza del Grupo Chihuahua (bajo ese nombre agruparon los Vallina a todas sus empresas) y en uno de los hombres más ricos de México. Al poco tiempo conoció a su primera mujer, Zonia Garza T. González, que era miembro de una conocida familia regiomontana y heredera de los fundadores del Banco Latino. Pronto llegaron los hijos: Zonia, Eloy III y Lorena. Y a pesar de que no fue fácil despegarse de la figura de su padre, con el tiempo Eloy supo encontrar un lugar en la élite empresarial mexicana y rápidamente se ganó el respeto de la sociedad chihuahuense.
Eloy Vallina fue un apasionado del vino, Además de explicar las cualidades del terruño, Don Eloy Vallina, detallaba las historias detrás de las etiquetas de la casa y los elementos que les han dado reconocimiento internacional.
«El camino es muy simple. Realmente nació como la idea de unos amigos que se les ocurrió hacer vino. Una historiadora muy importante en la región escribió que en 1968 en la hacienda hubo un grupo de franciscanos. Y entonces pensé, ~si hubo franciscanos y ellos confiaban en las bondades de su tierra, pues seguramente produjeron vino~ y pues con eso en la mente iniciamos el proyecto. En el 2004 plantamos las primeras vides». Relataba Don Eloy.
Los vinos de Encinillas son vinos de Chihuahua, que están hechos con toda la tecnología europea. En el 2008 Eloy conoció al enólogo francés Michel Rolland famoso en todo el mundo, lo invitó a sus viñedos. Al visitarlos, le gustó mucho la calidad de la tierra. Un año después, le llamó para que les diera algunas ideas y así lo hizo. En el 2012 se realizó una mezcla especial inspirada en el Château Margaux para Hacienda Encinillas y obtuvieron medalla de Oro en California.
«La Casona que fue nuestro primer vino. Megacero es el que más se vende, es más sencillo pero le gusta a la gente a pesar de que no es tan complejo como Hacienda de Encinillas. Anxelin, que nos han dicho que en náhuatl significa niña con alas, también ha tenido mucho éxito. Nosotros le pusimos así a este vino pensando en el Ángel de la Independencia como un ícono importante para México y creo que la etiqueta es muy bonita». Eloy Vallina.
(WineLoversTips)
Fuente: https://www.forbes.com.mx
https://documen.site