Participantes de la 44 Marcha del Orgullo LGBTTTI+ en Ciudad de México (CDMX) leyeron un pliego petitorio a Claudia Sheinbaum, jefa de Gobierno de CDMX, dando a conocer algunas de sus exigencias en pro de la comunidad; sin embargo, destacó que también algunas otras personas le reclamaron el dar un tardío “banderazo de salida” tras un retraso de más de 2 horas.
Aunque la 44 Marcha del Orgullo LGBTTTI+ tenía programado su inicio a las 10:00 a.m., Claudia Sheinbaum se presentó hasta después de las 12:30 p.m. en el Ángel de la Independencia. Ahí, estuvo acompañada por el comunicador Genaro Lozano, sin embargo, personas integrantes del Comité Orgullo y Dignidad manifestaron su inconformidad ante este retraso del avance de los contingentes por esperar a la mandataria.
Al respecto, una de las presentes tomó un micrófono y señaló que la marcha era revolucionaria y contestataria, por lo que no podían decirles a qué hora tenían que salir. “Vámonos, es nuestra marcha”, dijo arengando al resto de presentes, ganándose el aplauso de Daniel Vives Ego ‘La Supermana’ y la diputada de Morena Salma Luévano.
Pese a ello, la activista Ofelia Pastrana dio la palabra a Natalia Lane, defensora de los derechos humanos de las mujeres trans, a fin de que leyera un pliego petitorio para Claudia Sheinbaum. Sin embargo, cuando esta comenzó a hablar la jefa de Gobierno de Ciudad de México le arrebató la palabra con un segundo micrófono para decir únicamente que es una ciudad de derechos y todos eran “bienvenidas, bienvenidos y bienvenides».
“‘¡No, no, no!”, se escuchó decir a Natalia Lane enseguida al ver cómo posteriormente a esos dichos Sheinbaum Pardo bajó de las escaleras del monumento y comenzó a dejar el lugar. Ante ello, Ofelia Pastrana instó a la política capitalina a volver para escuchar las peticiones de la comunidad LGBTTTI+, por lo que esta dio media vuelta para regresar al lugar.
En el posicionamiento, los colectivos señalaron que la CDMX se ha caracterizado por el largo trabajo de activistas, ciudadanas y ciudadanos, colectivas y sociedad civil organizada para lograr el reconocimiento de los derechos de todas las personas. Sin embargo, Lane dijo que aunque han participado para que la ciudad se convierta y garantice los derechos de ejercer ciudadanías plenas, las mujeres lesbianas, bisexuales, trans, pansexuales e intersexuales pocas veces han sido visibilizadas pese a jugar un papel central.
Ante ello consideraron que falta un largo camino para que las vidas de las mujeres LGBTTTI+ estén libres de cualquier tipo de discriminación, violencia u omisión. Al respecto, dijeron que no existen políticas públicas que atiendan de manera específica y adecuada sus necesidades, por lo que es fundamental que haya acciones institucionales dirigidas a temas relevantes como el acceso a vivienda digna, salud integral y reconocimiento de trabajo en condiciones seguras.
Asimismo, pidieron trabajar en la educación integral de la sexualidad sin prejuicios, vivir una vida libre de la violencia y el libre desarrollo de la personalidad.
Finalmente, dijeron que si bien existe en la capital del país un marco legislativo que garantiza el reconocimiento de la identidad de género para personas trans, el matrimonio entre personas del mismo sexo y la adopción lesbomateral y homoparental, es necesario seguir con el trabajo de capacitación y sensibilización de los servidores públicos y orientar un presupuesto específico para atender a las poblaciones de las llamadas “minorías”.