El tiroteo en escuela de Texas, es el más mortífero en casi una década, tanto que reavivó el debate sobre el tráfico de armas en Estados Unidos (EU).
Los primeros informes detallan que los 19 niños y dos profesores masacrados se encontraban en una única aula de cuarto grado donde el pistolero se atrincheró, informaron las autoridades.
Policía de Texas evacúa a otros menores
La policía rodeó la Escuela Primaria Robb en Uvalde, Texas, rompiendo las ventanas en un esfuerzo por evacuar a los niños y al personal, dijo el portavoz del Departamento de Seguridad Pública de Texas, Chris Olivarez.
Asimismo, las autoridades confirmaron que al entrar al aula mataron a Salvador Ramos, un joven de tan solo 18 años.
Sin embargo, el ataque no comenzó en la escuela, momentos antes del atentado, el individuo balaceó a su abuela en su casa, luego se dirigió a la escuela donde estrelló su coche y entró al edificio con equipo táctico y un rifle, según las autoridades.
Pese a los disparos, su abuela sobrevivió, pero se encuentra en estado crítico, la policía espera que sobreviva para que pueda dar máas detalles sobre lo ocurrido.
Según los reportes, también hubo niños que resultaron heridos, dijo Olivarez a Fox News, aunque no tenía un recuento exacto.
Ataque en EU, el segundo en menos de 10 días
El ataque, que ocurrió 10 días después de que un supremacista blanco disparó a 13 personas en un supermercado de Búffalo, llevaron al presidente de aquel país, Joe Biden, a hablar directamente a los estadounidenses sobre el tema del control de las armas.
«Como país, tenemos que preguntarnos cuándo, en nombre de Dios, vamos a enfrentarnos al grupo de presión de las armas, cuándo, en nombre de Dios, haremos lo que todos sabemos en nuestras entrañas que hay que hacer», dijo su discurso.
Biden ordenó que las banderas ondearan a media asta todos los días hasta la puesta de sol del sábado en conmemoración de la tragedia: «Estoy harto de esto. Tenemos que actuar», dijo sin entrar en detalles.
Sin embargo, las perspectivas de legislar siguen siendo escasas en Washington. Prácticamente todos los republicanos del Congreso se oponen a nuevas restricciones de armas, citando la garantía del derecho a llevarlas en la Constitución de Estados Unidos.
El Papa Francisco dijo que estaba «desconsolado» por el tiroteo y pidió el fin del «tráfico de armas» al que consideró «indiscriminado».
El tiroteo de Texas se erige como el más letal en una escuela desde que un hombre armado mató a 26 personas, entre ellas 20 niños, en la primaria Sandy Hook de Connecticut en diciembre de 2012.
La comunidad, situada en lo más profundo de la región de Hill Country, a unos 130 kilómetros al oeste de San Antonio, tiene unos 16 mil residentes, casi el 80% de ellos hispanos o latinos, según datos del censo de Estados Unidos.
Los dos profesoras muertas fueron identificadas como Eva Mireles e Irma García, que trabajaban en la misma aula de cuarto grado.
Mireles, a quien le gustaba correr y hacer senderismo, tenía una hija adulta y un marido que trabaja como policía en las escuelas. García, que trabajó en la escuela durante más de dos décadas, tenía cuatro hijos.
Armas en EU fluyen como el agua
Los demócratas en Washington renovaron sus llamados a favor de leyes más estrictas sobre el control de las armas. El senador estadounidense Chris Murphy, de Connecticut, uno de los principales defensores de la legislación para restringir la proliferación de armas, dijo a los periodistas: «Simplemente no entiendo por qué la gente aquí piensa que somos impotentes».
«Saben, las armas fluyen en este país como el agua. Y por eso tenemos un tiroteo masivo tras otro», dijo.
De acuerdo con Reuters, la Cámara de Representantes, controlada por los demócratas, aprobó el año pasado dos proyectos de ley que amplían los controles de antecedentes para la compra de armas de fuego, pero la legislación no ha avanzado en el Senado, donde se necesitan al menos 10 votos republicanos.
Tras el tiroteo de Uvalde, al menos dos republicanos electos de Texas pidieron que se refuerce la seguridad en las escuelas y se arme a los profesores, un enfoque al que se oponen los defensores del control de armas.
«La realidad es que no tenemos los recursos para tener fuerzas de seguridad en todas las escuelas», dijo el martes el fiscal general de Texas, Ken Paxton, a Fox News. «Nada va a funcionar perfectamente».
El Tiroteo en escuela de Texas tuvo lugar días antes de que la Asociación Nacional del Rifle, el principal grupo de presión de la industria de las armas, celebre su reunión anual en Houston.