Por lo menos un grupo de 12 personas originarias de Valle de Chalco Solidaridad, ubicado en el Estado de México, arribaron a la ciudad de Chihuahua el pasado 13 de noviembre para orquestar un montaje de represión en algunas sucursales del Grupo Salinas, según logró identificar personal de Gobernación del estado.
El director general de Gobierno, Joel Gallegos Legarreta, afirmó que este tipo de desalojo no fue intencionado en contra de un negocio en específico, pero que a través de los acuerdos publicados en el Periódico Oficial del Estado, cuentan con la facultad de desalojar y cerrar estos negocios a fin de velar por la salud de la población.
Luego de entrevistar a varios de los detenidos, afirmaron que por la noche acudieron al estado de Chihuahua, se hospedaron en el Hotel Ibis, ubicado en el primer cuadro de la ciudad, a un par de metros donde surgió una confrontación el sábado 14 de noviembre. Y se hicieron pasar por ciudadanos inconformes para agredir a los agentes e inspectores que desalojaban a todas las personas del interior.
Por la mañana, antes de las 9 horas, el grupo identificado como “choque” se resguarda al interior del Banco Azteca, incluso sorprendieron a los propios trabajadores al ver a estas personas que desde temprana hora acudieron a retirar dinero, cuando cotidianamente no cuentan con gran flujo de clientes y menos los fines de semana.
Al momento de la discusión y al entrar en su papel de provocadores, los involucrados con un acento distinto al del estado, comenzaron a pedir que no les cerraran el banco, toda vez que tenían que retirar dinero para el “día a día”, lo cual a su vez era grabado para transmitirlo en un programa afín al Banco Azteca, según información que logró recabar el personal de Gobernación y elementos de seguridad.
Entre las discusiones, se detectaron varias personas que estuvieron incitando a los golpes y a las agresiones verbales, todos con características del Estado de México, y quienes presuntamente eran liderados por un joven de nombre José Luis P. H., quien aceptó haber recibido la instrucción de viajar a Chihuahua para evitar el cierre de sucursales.
Los elementos de seguridad lograron la detención de tres de los presuntos responsables, quienes cuentan con domicilios en el Estado de México, mientras que el resto de los participantes lograron retirarse del lugar y evitaron sanciones por estos hechos que posteriormente fueron transmitidos en cadena nacional como una represión del gobierno del estado.
El Grupo Salinas, a través de Banco Azteca y Elektra, se ha inconformado por el cierre de las instalaciones durante las restricciones que solicitó el gobierno del estado, por lo cual omitió las instrucciones y es cuando intervienen los elementos de seguridad y Gobernación para desalojar o clausurar estas instalaciones, según explicó Joel Gallegos.
Comentó que de estos hechos se encuentran decenas de videos, imágenes y otros datos adicionales, con los que se logró demostrar que los instigadores tenían el objetivo de provocar al uso de la fuerza pública y se procedió siempre conforme a derecho.
Entre los detenidos fueron identificadas otras dos personas de nombres Joaquín S. H. y José B. R., quienes en sus credenciales de elector muestran domicilios del Estado de México, y aceptaron haber colaborado como presuntos infiltrados en este conflicto que se ha generado entre la empresa Salinas y el estado de Chihuahua.
El propio gobernador Javier Corral Jurado dijo que estas personas que estaban dentro de la sucursal y fuera de ella, “fueron llevadas ahí por la propia televisora, por el propio Banco Azteca, precisamente para provocar la acción de resistencia, que fuera la Policía para cumplir con el ordenamiento del protocolo sanitario que dictó el Consejo Estatal de Salud”.
Añadió que las imágenes que han reproducido en televisión se trata precisamente de una sucursal en donde este grupo de mexiquenses dijeron que no se iban a retirar, que los sacaran, y que tenían que depositar dinero en ese mismo momento a diversas partes del país, “fue un montaje, no son precisamente clientes, fueron personas que ellos llevaron”.
En la entrevista que fue retransmitida, Javier Corral reiteró que las medidas de restricción de la movilidad durante los últimos dos fines de semana fueron decisiones tomadas por el Consejo Estatal de Salud, no son un capricho del gobernador, sino acciones para cuidar la salud y la vida de los chihuahuenses.
Realmente, dijo, la gente ha sido muy solidaria, muy cumplida, muy comprometida y muy disciplinada, “hemos encontrado la gran solidaridad del comercio organizado, de micro, pequeñas y medianas empresas; de la industria maquiladora de exportación, con el horario de restricción que en sábado y domingo es total, y también, debo decirlo, la Asociación de Bancos en el estado Chihuahua aceptó participar con nosotros”.
Lamentó que sólo en las empresas de Ricardo Salinas Pliego, particularmente las tiendas Elektra y las sucursales de Banco Azteca, no aceptaron cumplir con estas disposiciones, en un franco desafío a la autoridad estatal y al Consejo Estatal de Salud de no acatar las disposiciones y abrieron el sábado y domingo, cuando se había pedido a todos permitir esos días con el propósito de bajar el nivel de contagios en el estado de Chihuahua y por lo tanto, el nivel de ocupación hospitalaria.
Cabe mencionar que todos los negocios de todos los giros deben acatar los acuerdos publicados por el estado, toda vez que se impusieron medidas a la movilidad, principalmente los fines de semana, con lo cual se busca reducir los indicadores de contagios y muertes por el Covid-19.