En conferencia de prensa desde Sinaloa, los integrantes del Gabinete de Seguridad rindieron un informe sobre los hechos violentos registrados en Culiacán. Cresencio Sandoval, secretario de la Defensa, explicó que se trató de una acción directa para la captura de un presunto delincuente que contaba con una orden de aprehensión provisional con fines de extradición, emitida por un juez federal.
Admitió que el grupo responsable “actuó de manera precipitada, con deficiente planeación, así como falta de previsión sobre las consecuencias de la intervención, omitiendo además obtener el consenso de sus mandos superiores”.
Dijo que la fuerza participante fue agredida cuando estaba esperando una orden de cateo “configurándose la flagrancia en el uso de armas de fuego, desencadenándose una acción directa al interior del domicilio en donde se ubicó al presunto de delincuente”.
También señaló que se desestimó el poder de convocatoria y la capacidad de respuesta de esa organización delictiva para evitar el aseguramiento de Ovidio Guzmán López.
Al advertir el alto índice de violencia que se produjo, este Gabinete de Seguridad decidió ordenar el retiro de las fuerzas del domicilio (…) con la acción anterior el grupo delincuencial suspendió las agresiones y libera al personal militar que había sido retenido”.