Arturo Marvill 9 diciembre, 2024
Las únicas esperanzas que los Dallas Cowboys tenían para colarse a los playoffs este lunes quedaron sepultadas a manos de los Cincinnati Bengals, que se llevaron la victoria por 27-20, y de paso se sacuden una hegemonía de Dallas en condición de visita.
Lo que lucía ser una fiesta en Arlington, tras una leve mejoría de Dallas que sumó tres victorias consecutivas, se convirtió en un infierno, y con Philadelphia amarrando el Este de la Conferencia Nacional, los Cowboys sólo esperan al final de una temporada que se puede describir como una auténtica pesadilla.
Parecía que la victoria en día de acción de gracias ante los Giants le traerían una motivación importante a los azul y plata, pero nuevamente los fantasmas del presente llegaron al AT&T Stadium.
Dallas vuelve a ser víctima de sus errores
Joe Burrow lanzó un pase de touchdown de 40 yardas a Ja’Marr Chase para romper el empate después de que Dallas fallara un despeje bloqueado para devolver el balón a Cincinnati en los últimos dos minutos.
Los Cowboys estaban a punto de recuperar el balón con el marcador empatado en la primera jugada después de la advertencia de los dos minutos cuando Nick Vigil bloqueó un despeje de Ryan Rehkow de Cincinnati.
Amani Oruwariye intentó atrapar el balón que rebotaba cuando dejarlo solo le habría dado la posesión a Dallas. Oruwariye no pudo retenerlo, y Maema Njongmeta de los Bengals lo recuperó en la yarda 43 de Cincinnati con 1:53 restantes.
Tres jugadas después, Burrow lanzó a Chase, quien evadió a DaRon Bland y corrió sin ser tocado el resto del camino para tomar la delantera con 1:01 por jugar.
El touchdown ganador aseguró un cuarto juego consecutivo de al menos 300 yardas por pase y tres touchdowns para Burrow, quien terminó con 369 y tres anotaciones, dos de Chase