Miguel Marrufo 15 julio, 2024 2 min read
Autoridades confirman que el intento de magnicidio fue un fracaso de los servicios de seguridad
Donald Trump es protegido por el Servicio Secreto luego que intentaron atentar contra su vida. Foto: Anna Moneymaker/AP
Thomas Matthew Crooks, el joven de 20 años que disparó contra Donald Trump durante un mitin el sábado en Butler, Pennsylvania, había comprado 50 rondas de municiones previo al ataque, informa hoy la cadena CNN.
Un alto cargo de las fuerzas de seguridad dijo al medio estadounidense que Crooks compró los cartuchos en una armería local apenas unas horas antes de realizar su ataque, en el que Trump resultó herido en su oído derecho, uno de los asistentes al mitin murió y Crooks fue abatido por el Servicio Secreto.
CNN informó también que el padre de Crooks tiene registradas más de 20 armas a su nombre, todas adquiridas legalmente.
El arma utilizada por el tirador también pertenecía a su padre; en su cuerpo se encontró además un transmisor. Cuando se hizo una inspección, se detectó que en el auto de Crooks, estacionado cerca de Butler Farm Show Grounds, donde se realizó el mitin, había un receptor con cables que iban a una caja metálica con posibles explosivos en la cajuela.
Fuentes policiales dijeron a CNN que una de las teorías que se manejan es que Crooks pensaba hacer detonar los explosivos de su coche para desviar la atención y poder disparar contra Trump tranquilamente.
Sin embargo, que un policía lo encontrara en el techo de un inmueble habría cambiado sus planes y lo habría obligado a disparar antes.
El tiroteo en el mitin de Trump ha desatado una ola de críticas ante lo que se considera un gran fallo de los servicios de seguridad.
Los francotiradores apostados cerca de Trump en el evento en Butler, Pennsylvania. Uno de ellos abatió a Thomas Matthew Crooks, tras dispararle al exmandatario. FOTO: GENE J. PUSKAR. AP
La Policía de Pennsylvania aclaró que no era responsable de la zona donde se encontraba el inmueble donde se apostó el tirador. Uno de los equipos locales de francotiradores debía cubrir ese edificio, dijeron fuentes de la investigación a CNN.
En entrevista con Kate Bolduan, el secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, admitió que el intento de magnicidio fue un fracaso de los servicios de seguridad.
“Un incidente como este no puede ocurrir”, reconoció. Subrayó que el presidente Joe Biden ordenó una investigación independiente para saber qué pasó. Sin embargo, cuando Bolduan le preguntó quién falló en garantizar la seguridad del mitin, Mayorkas dijo que “cuando digo que algo como esto no puede suceder, estamos hablando de un fracaso. Vamos a analizar en esa investigación independiente cómo ocurrió eso, por qué ocurrió y hacer recomendaciones y dar conclusiones para garantizar que algo así no vuelva a suceder