por Xataka mexico Gonzalo Hernández
China continúa su expansión en el mercado automotriz mexicano con el lanzamiento de nuevos vehículos de BYD, como el Dolphin Mini, que es una de las opciones de automóviles eléctricos más económicos hasta ahora en el mercado nacional.
Tras el lanzamiento de los nuevos vehículos de BYD, el gobernador de Nuevo León, Samuel García, habló con Stella Li, CEO de la compañía en América Latina, revelando a través de un comunicado que actualmente la marca está analizando la posibilidad de expandirse en la región.
En el comunicado se puede leer: «BYD se encuentra ya en operaciones con la fabricación de camiones eléctricos en Nuevo León, en donde busca materializar una serie de planes de expansión».
Cabe la pena mencionar que aunque el anuncio gubernamental parece indicar que la marca ya está operando oficialmente en México, de momento no hay confirmación oficial por parte de BYD. Sin embargo, desde hace meses existe el rumor de que la compañía tiene planes para construir una fábrica en el país.
Por ahora, García señala que BYD ya tiene en México seis modelos disponibles: Han, Tang, Yuan Plus, Dolphin, Seal y Song Plus DM-i. Ahora se suma el Dolphin Mini, además de camionetas, vehículos de lujo y autos eléctricos accesibles, junto con los camiones eléctricos que se están fabricando en colaboración con Marcopolo en Nuevo León.
El caso del Dolphin Mini requiere una mención especial, pues se trata de un hatchback 100% eléctrico que ofrece configuraciones de 300 y 380 km de autonomía por menos de 400 mil pesos.
El BYD Dolphin Mini
Este modelo también se distingue por sus dimensiones compactas, con apenas 3.78 metros de largo, un motor eléctrico de 75 hp y una «batería blade» de 30 o 38 kWh según la marca, que se presenta como «super segura».
BYD contra Tesla y las restricciones de Estados Unidos
La marca BYD es conocida actualmente por su catálogo de vehículos eléctricos asequibles, siendo uno de los principales competidores de Tesla, a la que llegó a superar en 2023. De esta marca, el magnate se burló en 2011 cuando le preguntaron si veía en ella un rival para su empresa.
BYD se fundó en China como una compañía de baterías para dispositivos como smartphones y tablets, incluido el iPad, antes de pasar en 2003 a la industria automotriz como fabricante de autos eléctricos aprovechando su experiencia en este campo.
A pesar de su crecimiento y de vender más autos eléctricos que Tesla, BYD, y en general los productos importados desde China, enfrentan un problema: no pueden llegar directamente a Estados Unidos sin pagar un alto impuesto, solo por venir desde el país asiático.
Para solucionarlo, empresas como BYD han decidido invertir en México construyendo fábricas o ensamblando sus productos en territorio nacional, de modo que puedan exportar a Estados Unidos reduciendo los impuestos.
En el país vecino son conscientes de la situación, al grado de firmar acuerdos para intercambiar información con México sobre las inversiones manufactureras de China y evitar que el país asiático pueda eludir algunas restricciones comerciales, como en el tema de semiconductores.
En cualquier caso la situación beneficia a México, ya que tiene el interés para recibir productos extranjeros y una mayor inversión, convirtiéndose también en uno de los mayores exportadores de bienes a Estados Unidos. Aunque estos sean chinos, se traducen en más recursos, tanto por el tema de impuestos como por la inversión directa que significa para el país