Arturo Marvill 14 enero, 2024
Cuando se insiste con algunos jugadores que no funcionaron en el torneo anterior, cuando se sigue sin haber capacidad de reacción, cuando la ofensiva da sólo destellos pero en general sigue sin preocupar al rival, cuando en el área técnica no se le da una buena lectura de juego y aprovechar las ventajas de estar con un jugador de más en la cancha, simplemente cuando se sigue jugando como se terminó el torneo anterior, entonces lo primero en que se piensa es en ese discurso de la directiva que se dio antes de anunciar que Diego Mejía se quedaba con DT de Bravos: Ya no habrá tolerancia y los malos resultados tendrán consecuencia pronto en el banquillo. Y tal pareciera que estas palabras a Mejía le entraron por un oído y le salieron por el otro. Ahora se tiene un plantel más vasto, con más opciones ofensivas y defensivas, más posibilidades de variaciones en los planteamientos de partido. Pero todo se ve igual. Bravos pudo, pero no supo……. o no quiso. Ahora que vienen dos grandes a Juárez, veamos si esto le inyecta motivación al plantel en general o simplemente la debacle se comienza a dar desde temprano.
En el primer tiempo FC Juárez prácticamente no existió. Mejía sigue insistiendo en que el Puma Chávez puede ser un referente a la ofensiva de Bravos. Pues no lo es y desde que llegó nunca lo ha sido. El travesaño salvó la portería de Jurado que, dicho sea de paso, se vio bien en su debut con el cuadro fronterizo. Él nada tuvo que ver en el gol de los universitarios y salvó una clarísima de gol en contra a los fronterizos. Mientras, los Pumas se acomodaban y se iban al frente sabiendo que el rival no preocupaba del todo en su ataque. En la escasa ofensiva de los verdes se dio una jugada donde Avilés, el eterno Avilés Hurtado, el de los pies sabios, se auto fabrica una jugada donde al ingresar al área es trabado por una pierna defensiva de Pumas. El penal parece claro, pero el arbitro se lo traga enterito para la primer cuchillada contra FC Juárez del torneo. De ahí en fuera, los fronterizos no existieron al frente durante todo el primer tiempo.
En la segunda parte todo parece igual del lado verde. El empate se veía bastante saludable, o por lo menos eso reflejaban en actitud los jugadores fronterizos. Mientras del otro lado, Pumas ingresaba a Funes Mori en el debut del mellizo con los universitarios. El primer cambio de Juárez fue el ingreso de Ángel Saldívar por Amaury Escoto. El Puma Chávez seguía en el terreno de juego. Luego 10 minutos después ingresaba el uruguayo Manu Castro a la cacha después de más de un año de haber sido adquirido por la escuadra fronteriza. Y dos minutos después de los cambios, llega el gol en contra. Al minuto 68, viene un servicio al costado para el Chino Huerta, que avanza con el balón y en los linderos del área y ante la tibia y casi displicente marca de la defensa de Bravos, con toda la libertad levanta la cabeza y manda un servicio medido a palo derecho. El Palermo Ortíz se pierde en la marca y llega solo el Toto Salvio y de aire golpea de derecha el balón a la contra parte de Sebastián Jurado que nada pudo hacer para hacer estallar las tribunas en CU. Se suponía que Bravos reaccionaría con furia y más unidades al frente a buscar el empate. Pero todo fue eso, una simple suposición. Mejía decide sacar a a su favorito Diego Chávez para ingresar al uruguayo Michael Santos, el cual provoca una falta en los linderos del área de tal magnitud, que el arbitro Mario Terrazas decide echar al brasileño Nathan da Silva por considerar jugada trabada con oportunidad manifiesta de gol. Pumas se queda con diez y en el cobro de la falta, como casi siempre, no pasa nada y todo sigue igual. Lejos de presentirse el empate, al 92′ viene una jugada donde la defensa de Bravos está mal parada y en una serie de triangulaciones el Chino Huerta anota de derecha sobre la salida de Jurado. El VAR manda llamar a Terrazas que echa para atrás el gol de Huerta al detectar una falta sobre Hurtado previa a la anotación. Al 97 el arbitro silba el final y Diego Mejía se lanza sobre el cuerpo arbitral por considerar que era muy poco tiempo de compensación, cuando en el fondo él sabía que ni jugando media hora más, Bravos iba a ser capaz de empatar.
Se vienen dos visitas importantes a la frontera. Aquí estarán Cruz Azul y América de manera consecutiva jugando en la frontera y tal vez definiendo el puesto de Diego Mejía al frente de Bravos. O por lo menos eso es lo que nos hizo creer la directiva cuando decidieron darle continuidad al técnico queretano. Que hay que esperar?. Pues que se utilice más a los recién llegados, que haya variación en el esquema de juego, que se juegue con alegría y valentía y no con miedo por lo que los rivales representan y sobre todas las cosas, que se haga todo lo posible por sacar de zona de multas al equipo, lugar en donde ya se encuentra instalado desde ahorita. Plantel se tiene, pero hay que saberlo mover