Durante su mandato, Luis Echeverría se caracterizó por su distanciamiento con empresarios, propuestas populistas y represión a movimientos sociales
El expresidente de México, Luis Echeverría murió a los 100 años de edad la noche de este viernes en su casa de Cuernavaca, Morelos.
Luis Echeverría Álvarez fue presidente de 1970 a 1976, con un mandato envuelto en la polémica debido a hechos como El Halconazo, la represión estudiantil del 10 de junio de 1971. Echeverría era Secretario de Gobernación durante el gobierno de Gustavo Díaz-Ordaz, protagonista de la represión estudiantil del 2 de octubre de 1968.
A pesar de los sucesos de 1968, Luis Echeverría llegó a la presidencia a través de unas elecciones muy cómodas. Compartiendo su candidatura por el PRI con el PPS y el PARM, y teniendo como único opositor -por el PAN- a Efraín González Morfín, obtuvo el 84.63% del total de las votaciones. “Además de la votación presidencial, la integración de XLVIII Legislatura se mantuvo de manera idéntica a como se había distribuido la Cámara de Diputados desde 1964: 178 diputados del PRI, 20 del PAN, 10 del PPS y 5 del PARM. En tales condiciones, la desventaja de la oposición se mantuvo en todos sentidos”, informa la Cámara de Diputados en un resumen histórico sobre el Gobierno de Echeverría.
Como presidente, Echeverría impulsó ciertos cambios que dieron la impresión de una actitud más abierta a la tolerancia. Sin embargo, de manera contradictoria, a diferencia de la mayoría de las políticas de Echeverría, la » apertura democrática » sólo se expresó tímidamente en términos jurídicos. La represión contra los movimientos sociales fue uno de los sellos de su mandato.
Un hecho que marcó la presidencia de Echeverría fue la creación y consolidación de las guerrillas. “En el sexenio, las acciones de todos estos grupos radicales mantuvieron un clima de inestabilidad y zozobra en la sociedad a través de asaltos y secuestros, e implicaron respuestas igualmente violentas por parte del Estado. Aunque también se trató de contrarrestar a la guerrilla con el impulso a una reforma político-electoral que permitiera la participación legal de otros sectores de la sociedad”, añade la Cámara de Diputados.
¿Por qué Luis Echeverría estaba en prisión domiciliaria?
La Fiscalía Especial para Movimientos Sociales y Políticos del Pasado determinó en su momento indiciar a Echeverría por su presunta responsabilidad en la matanza de estudiantes de Tlatelolco, en 1968 y la matanza de 1971. Además, por la desaparición forzada de personas en la llamada Guerra sucia de México.
El 2 de julio de 2002 fue el primer funcionario político citado a declarar ante la justicia mexicana por estos hechos. En ese mismo año se libera una orden de aprehensión en su contra pero obtiene un amparo que deriva en un auto de libertad.
El 30 de junio de 2006, un juez federal ordenó de nueva cuenta su arresto por la matanza de 1968 y le fue decretada prisión domiciliaria debido a su estado de salud y su edad. Fue absuelto el 8 de julio de 2006, debido a la prescripción del delito en noviembre de 2005. El 30 de noviembre de 2006 el magistrado Ricardo Paredes Calderón, del Segundo Tribunal Unitario de Primer Circuito de Procesos Penales Federales le decretó auto de formal prisión por el delito de genocidio por las matanzas de estudiantes en 1968 y 1971, pero el 20 de marzo de 2007 un tribunal federal le concedió la suspensión definitiva del auto.
El 26 de marzo de 2009 un tribunal federal decretó la libertad absoluta del expresidente, así como su exoneración del cargo de genocidio por los hechos referidos.
7 momentos clave de la presidencia de Luis Echeverría
De acuerdo al documento “Nuestro siglo: los años de la apertura democrática” de la Cámara de Diputados, estos fueron algunos momentos clave del sexenio de Echeverría.
Desde su campaña presidencial, Echeverría había planteado lo que haría su gobierno en términos económicos: creación de nuevos empleos, desconcentración industrial, apoyo a las regiones más atrasadas, justa distribución de la riqueza y, sobre todo, un cuestionamiento muy fuerte al papel de la iniciativa privada que había privilegiado en su beneficio el crecimiento económico en detrimento de la justicia social.
Por otro lado, propuso darle un mayor impulso al gasto social, particularmente a la educación y salud, tratar de resolver el atraso en que se encontraba sumido sector agropecuario, luchar por mejores condiciones de intercambio para los productos mexicanos en el exterior y, desarrollar un papel de liderazgo en torno a la integración económica latinoamericana.
En esta perspectiva, una de las intenciones de Echeverría fue, con base en su propia interpretación de los principios básicos de la Revolución mexicana, la de recuperar el control de la economía que -según él- poco a poco se había trasladado a manos de la iniciativa privada. El mecanismo apropiado para tal fin, fue intervención gradual del Estado en la economía y la ampliación sus funciones en todos los niveles de la misma, con lo cual se justificaba la necesidad de pasar a un nuevo esquema de desarrollo q permitiera continuar el ritmo de crecimiento de los años sesenta, pero corrigiendo los enormes desequilibrios sociales que se habían generado. En ese sentido, Echeverría pensaba que era posible solucionar las contradicciones generadas por el ‘’ desarrollo estabilizador “, sin atentar contra el esquema de crecimiento acelerado.
Echeverría, tan pronto asumió la presidencia, envió al Congreso iniciativas de creación del Instituto Nacional para el Desarrollo la Comunidad Rural, del Instituto Mexicano de Comercio Exterior y del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología. También envió otras iniciativas que reformaron leyes vigentes, entre las destacaron la Federal de Reforma Agraria, la Orgánica de Petróleos Mexicanos y la de Control de Organismos Descentralizados y Empresas de Participación Estatal.
En 1972 la XLVIII Legislatura reformó el artículo cuarto constitucional y expidió una nueva Ley General de Población, con el fin de adoptar una política de población. La reforma constitucional estableció el derecho de las parejas a decidir ‘’de manera libre responsable e informada sobre el número y espaciamiento de los hijos” . Paralelo a esto último, en 1976 se creó el Consejo Nacional de Población (Conapo), que quedó a cargo de la planeación demográfica y se expidió la Ley General de Asentamientos Humanos, que estableció las bases jurídicas para ordenar los procesos relacionados con los asentamientos humanos y la distribución de la población en el territorio nacional.
La política económica-social más evidente a lo largo de su gobierno, fue el uso al llamado gasto social . Este se mantuvo por encima de otros rubros, aun por encima de la inversión en el sector industrial y paraestatal. Dentro del gasto social, la mayor inversión se dio en el sector agropecuario -que creció en el periodo a una tasa promedio anual de 34%-, seguido por el educativo y aspectos vinculados al desarrollo tecnológico -18% promedio de crecimiento anual- y, en tercer lugar, por el de salud.
La situación financiera del país se fue deteriorando fuertemente. Y si bien en el sexenio la economía todavía creció a un ritmo acelerado ( 5% promedio anual ), la inflación aumentó a niveles nunca antes vistos en la economía mexicana ( 14.2% promedio anual ), sobre todo después de 1973. Además, la inflación provocada por el aumento del circulante empezó a ser reforzada por los aumentos internacionales a los energéticos y la inflación mundial que para entonces apareció en el horizonte. Para 1976, la situación económica del país evidenciaba los síntomas de una profunda crisis, donde los problemas con la balanza de pagos, la disminución aguda de la producción agrícola e industria, el endeudamiento, la f