Se terminan las palabras para describir a Nadal en el tenis; el tipo más dominante de la historia en arcilla sumó su Grand Slam 22 este domingo.
Se terminan las palabras para describir a uno de los deportistas más dominantes de todos los tiempos. Este domingo, en lo que se ha convertido en una auténtica tradición, Rafael Nadal quedó campeón de Roland Garros por decimocuarta vez en su enorme trayectoria, confirmando que es el tenista más exitoso de la historia con 22 títulos de Grand Slam.
Ni siquiera las lesiones crónicas, los dolores en tobillos y rodillas logran frenar al mejor arcillista de todos los tiempos, el español que ha hecho de París su patio de juegos anualmente para agigantar su leyenda, que le tiene ya con dos títulos más de Grand Slam que Roger Federer y Novak Djokovic en la lista de máximos ganadores.
La nueva víctima en la gigantesca lista de Nadal en la tierra batida francesa es el noruego Casper Ruud, novato en Finales de torneos grandes y a quien el ibérico barrió en apenas tres sets con parciales de 6-3, 6-3, 6-0.