El mundo podría entrar en una segunda y aún más destructiva fase de inequidad en el acceso a las vacunas.
El Director General de la Organización Mundial de la Salud, Tedros Adhanom Ghebreyesus, dijo que a menos que el mundo cambie el modelo actual de distribución de las vacunas contra la COVID-19, entraremos, “en una segunda y aún más destructiva fase de inequidad en el acceso a las vacunas”.
En conferencia de prensa virtual desde la ciudad de Ginebra, el jefe de la OMS dio a conocer que tan solo la semana pasada se reportaron 18 millones de nuevas infecciones de COVID-19 en todo el mundo.
La cifra de muertes se ha mantenido estable por el momento; sin embargo, la Organización mostró su preocupación sobre el impacto que ha tenido la pandemia en los trabajadores sanitarios, quienes se encuentran agotados, y los sistemas de salud, también sobrecargados.
“En algunos países, los casos parecen haber llegado a su punto máximo, esto nos da esperanza de que lo peor de esta última ola haya pasado ya; sin embargo, ningún país está fuera de peligro aún”, dijo.
“Estoy particularmente preocupado por muchos países que mantienen bajas tasas de vacunación, puesto que las personas tienen mayor riesgo de enfermedad grave y muerte por COVID-19 cuando no están vacunadas”, señaló.
En promedio, la variante Ómicron podría parecer menos severa, pero la narrativa de que es una enfermedad leve es engañosa, afecta la respuesta general, y cuesta vidas.
“No nos equivoquemos, Omicron está causando hospitalizaciones y muertes, e incluso los casos menos graves están inundando las instalaciones sanitarias. El virus está circulando con demasiada intensidad y muchas personas siguen siendo vulnerables”, dijo.
El doctor Adhanom Ghebreyesus destacó en su mensaje de bienvenida, el hecho de que el mecanismo COVAX logró entregar el pasado fin de semana, la dosis número un mil millones de la vacuna contra la COVID-19; este hito es insuficiente y debemos hacer más para llevar vacunas a las personas que aún no están vacunadas.
Hay un crecimiento exponencial de los casos, sin importar la gravedad de cada una de las variantes, esto lleva invariablemente a un incremento en las hospitalizaciones y muertes, no sólo en México sino en América del Norte y otras partes del mundo, dijo Michael Ryan, Director Ejecutivo del Programa de Emergencias Sanitarias de la OMS.
«Si el virus logra esparcirse sin control entre la sociedad, es por lo que hemos aconsejado adherirse a medidas que mantengan al virus bajo control mientras protegemos los sistemas de salud y atravesamos esta ola».