El mandatario anunció que intensificarán las vacunas de refuerzos y alentarán a la población que rehúsa a recibir la dosis. Además, defendió la decisión de suspender vuelos con el sur de África
Con el doctor Anthony Fauci detrás, el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, ofrece una actualización sobre la variante Omicron en la Casa Blanca en Washington.
Con el doctor Anthony Fauci detrás, el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, ofrece una actualización sobre la variante Omicron en la Casa Blanca en Washington.. REUTERS/Kevin Lamarque
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, defendió este lunes la suspensión de los vuelos con el sur de África por la variante Ómicron, la cual según las primeras investigaciones es altamente transmisible y demanda que los gobiernos tomen medidas urgentes para frenar los contagios en sus territorios.
En rueda de prensa en la Casa Blanca, el mandatario demócrata dijo que la nueva variante ““es motivo de preocupación, pero no de pánico”.
“Lucharemos contra esta variante con acciones científicas y con conocimiento y velocidad, no con caos y confusión”, dijo. “Hoy tenemos más herramientas que nunca para combatirla, desde vacunas hasta refuerzos y vacunas para niños”.
Biden recordó cómo Estados Unidos estuvo luchando el año pasado contra la primera variante de COVID-19 y luego cómo fue también golpeada por la Delta.
El mandatario estadounidense también alentó a la población a recibir la vacuna completa contra el COVID-19; a los que no se han dado la dosis de refuerzo y a los que rehúsan recibirla.
“Las vacunas son gratuitas y están disponibles en 80.000 lugares de costa a costa. Una persona con la dosis de refuerzo es la más protegida contra el COVID-19″, dijo.
Personal sanitario realiza pruebas de diagnóstico para detectar el coronavirus.
Personal sanitario realiza pruebas de diagnóstico para detectar el coronavirus.
Y reiteró: “No esperes. Ve a buscar tu refuerzo, es el momento de hacerlo. Y si no estás vacunado, ahora es el momento de vacunarse y traer a tus hijos para que se vacunen“.
Hasta el momento no se han reportado casos de la variante Ómicron en Estados Unidos. Sin embargo, Biden dijo que en cualquier momento puede presentarse el primer contagio.
“Tarde o temprano, veremos nuevos casos de esta nueva variante aquí en los Estados Unidos y tendremos que enfrentarnos a esta nueva amenaza tal como nos enfrentamos a las que vinieron antes”, adivirtió.
El mandatario demócrata dijo que en caso de que las vacunas necesiten ser actualizadas al ser poco eficaces con la nueva variante, se desplegaran recursos para el desarrollo de nuevas dosis.
“Todavía no creemos que se necesiten medidas adicionales. Pero para estar preparados si es necesario, mi equipo ya está trabajando con funcionarios de Pfizer y Moderna y Johnson & Johnson para desarrollar planes de contingencia para vacunas y refuerzos si es necesario. También ordenaré a la FDA (Administración de Alimentos y Medicamentos) y a los CDC (Centros para el Control de Enfermedades) que utilicen el proceso más rápido posible sin tomar atajos para que las vacunas se aprueben y se comercialicen lo antes posible si es necesario”, dijo.
“No escatimo esfuerzo. Voy a eliminar todos los bloqueos para mantener a salvo al pueblo estadounidense “, agregó.
Biden, además, defendió la suspensión de vuelos con el sur de África y dijo que la medida se tomó por el “número significante” de casos de la nueva variante.
“Necesitábamos tiempo para que la gente tuviera la oportunidad de vacunarse ahora antes de que se trasladara a todo el mundo”, dijo.
Además, el mandatario también anticipó que no harán más restricciones de viaje y cree que no hay necesidad de declarar cuarentenas o medidas restrictivas.
“Si las personas están vacunadas y usan mascarillas, no hay necesidad de declarar cuarentenas”, dijo.
Por otra parte, los ministros de Sanidad del G7 destacaron hoy que la aparición de la “muy transmisible” variante ómicron del coronavirus obliga a tomar “acciones urgentes” y reconocieron la “relevancia estratégica de garantizar el acceso a las vacunas”.
En un comunicado, tras reunirse virtualmente convocados por la presidencia británica del grupo, los responsables sanitarios de los países más desarrollados elogiaron el “trabajo ejemplar” de Sudáfrica al detectar la nueva variante y alertar de ella, y reiteraron su compromiso -adoptado en la cumbre de líderes en junio- de donar mil millones de vacunas a los países pobres.
“La comunidad global se enfrenta, en una primera evaluación, a la amenaza de una nueva variante muy transmisible de la covid-19, que requiere acciones urgentes”, señaló el G7, integrado por Estados Unidos, Reino Unido, Alemania, Francia, Italia, Canadá, y Japón, más la Unión Europea (UE).
Los ministros, que volverán a verse en diciembre, “reconocieron también la relevancia estratégica de garantizar el acceso a las vacunas, incluido aumentar la capacidad de absorberlas y la preparación de los países para recibirlas y desplegarlas”.