El presidente de Paraguay, Mario Adbo Benítez, desconoció el gobierno de su homólogo de Venezuela, Nicolás Maduro, por lo que dijo que «no hay ningún cambio de postura de mi gobierno y creo que es de caballeros decirlo de frente».
A lo que se sumó el jefe del Ejecutivo de Uruguay, Luis Lacalle. Mientras que Nicolás Maduro, en respuesta, los retó a un debate sobre democracia y libertades, durante la sexta cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac).
«Mi presencia en esta cumbre, en ningún sentido ni circunstancia representa el reconocimiento al gobierno del señor Nicolás Maduro. No hay ningún cambio de postura de mi gobierno y creo que es de caballeros decirlo de frente», dijo durante su intervención Mario Abdo Benítez.
Mientras que el presidente de Uruguay, Luis Lacalle, sostuvo que su participación en la cumbre de este sábado, donde se definen las políticas públicas del continente para los próximos meses, no significa ser complaciente con el actuar de los gobiernos de Cuba, Nicaragua y Venezuela.
«Participar en este foro, no significa ser complaciente, señor Presidente (López Obrador); cuando uno ve que en determinados países no hay una democracia plena, cuando no se respeta la separación de poderes, cuando desde del poder se usa el aparato represor para callar las protestas, cuando se encarcelan opositores, cuando no se respetan los derechos humanos, nosotros, en esta voz tranquila pero firme, debemos decir con preocupación que vemos gravemente lo que ocurre en Cuba, en Nicaragua y en Venezuela», subrayó.
Nicolás Maduro propuso al presidente de Paraguay poner fecha, lugar y hora para un debate sobre democracia en Paraguay o Venezuela «estamos listos para darlo».
También le propuso al presidente Andrés Manuel López Obrador debatir sobre la democracia, libertades y resistencias de neoliberalismo. «Nosotros creemos profundamente en el diálogo de diversos, y yo le digo al presidente de Paraguay: ponga usted la fecha, hora y lugar para un debate en Paraguay, en Venezuela y en América Latina y estamos listos para darlo», respondió.
El heredero de Hugo Chávez hizo extensivo su reto a un debate también al presidente de Uruguay, Luis Lacalle, e incluso pidió al presidente Andrés Manuel López Obrador servir como mediador.
«Ponga usted, presidente López Obrador, y Venezuela esta lista para debatir de democracia, de libertades, de resistencia y de lo que haya que debatir, de neoliberalismo en cara a los pueblos en transmisión en vivo y en directo o en privado como ustedes quieran, sin exclusiones»
En ese mismo tono, Nicolás Maduro denunció que, en el escenario internacional, hay un acoso contra su régimen, al igual que en contra de Cuba y Nicaragua.
«Debemos de pasar la página del divisionismo que se insertó en la América Latina, del acoso a la revolución bolivariana, y ahora del acoso incesante a la revolución cubana y a la revolución nicaragüense, ese no es el camino, tendríamos suficientes piedras que tirar contra algunos de ustedes pero no vinimos a tirar piedras, vinimos a tender la mano para el trabajo, para el diálogo y para la unión», sostuvo.