El expresidente Donald Trump anunció que «aceptó la invitación» para recorrer la frontera sur de Texas con el gobernador Greg Abbott el 30 de junio, informó The Texas Tribune.
“La Administración Biden heredó de mí la frontera más fuerte, más segura y más segura en la historia de Estados Unidos y en pocas semanas la convirtió en la peor crisis fronteriza en la historia de Estados Unidos. Es una zona de desastre absoluta «, dijo Trump en un comunicado.
La construcción de un muro a lo largo de la frontera entre Texas y México fue una promesa clave durante la presidencia de Trump, pero nunca la cumplió por completo. Su promesa de que México pagaría por el muro no se cumplió, y las 450 millas de barrera que construyó estaban principalmente en Arizona y mucho menos se completó en el Valle del Río Grande, donde los cruces fronterizos son más frecuentes, según The Washington Post.
Abbott anunció el jueves pasado que Texas tomaría el asunto en sus propias manos y construiría su propio muro fronterizo para detener el flujo de migrantes de México. En una entrevista de un podcast el martes, explicó que el muro será al menos parcialmente financiado por colectas en la web –crowdfunding– y que el estado solicitará donaciones de todo el país.
El anuncio provocó inmediatamente denuncias de quienes dijeron que la aplicación de la ley de inmigración es una responsabilidad federal, no un trabajo estatal, y cuestionaron la constitucionalidad de las intenciones de Abbott.
Abbott también anunció planes para aumentar la capacidad de las cárceles locales a lo largo de la frontera y aumentar los arrestos al hacer que los policías estatales arresten a los migrantes por cargos estatales. Abbott programó una conferencia de prensa para el miércoles por la tarde, donde dijo que brindará más detalles sobre el plan.
