La Coordinación General de Seguridad Vial realizó el pasado fin de semana 113 intervenciones y exámenes de alcoholemia, dentro del Programa Médico a Bordo, el cual tiene como propósito prevenir la mezcla del alcohol con el volante.
De las 113 intervenciones, al menos 24 conductores resultaron positivo, por lo que fueron llevados a las instalaciones del Cerecito para cumplir con la sanción puesta por el Juez Cívico y quienes además recibieron cursos de manejo, adicciones y sensibilización y concientización social.
En este esquema de trabajo operativo, los oficiales son acompañados por un médico de la institución quien se encarga de aplicar el examen de alcoholemia a quien sea detectado conduciendo con aliento alcohólico.
Además se tuvo un registro de por lo menos 20 casos en que conductores de alto riesgo ocasionaron un accidente automovilístico en diferentes sectores de la ciudad, quienes ocasionaron daños a propiedad privada y a la infraestructura urbana.
Seguridad Vial continuará con este programa cuya finalidad es la prevención de accidentes ocasionados por personas que mezclan el alcohol y volante, poniendo en riesgo su integridad y la de terceras personas.