Irán emitió una orden de arresto, de la que notificó a la Interpol, contra el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y otras 35 personas por el asesinato en enero del poderoso general iraní Qasem Soleimani. El fiscal de Teherán, Alí Alqasimehr, explicó que esos 36 «responsables político-militares de Estados Unidos y también de otros países estuvieron involucrados en el asesinato del general Soleimaní». «Se ha emitido una orden de arresto y se ha requerido a la Policía Internacional que ponga una alerta roja», precisó Alqasimehr, citado por la agencia oficial IRNA.
Una notificación roja de Interpol, el más alto nivel de alerta, es una solicitud a fuerzas del orden de todo el mundo para localizar y detener provisionalmente a una persona en espera de extradición, entrega o acción judicial similar. El fiscal detalló, asimismo, que la acusación contra esos 36 individuos, incluido Trump, es de «asesinato» y «acto terrorista».
No obstante, es poco probable que Interpol acepte la solicitud de Irán ya que su normativa le prohíbe «emprender cualquier intervención o actividad de naturaleza política». Soleimaní, el comandante de la Fuerza Quds de la Guardia Revolucionaria, murió junto al número dos de la iraquí Multitud Popular y jefe de Kata’ib Hizbulá, Abu Mahdi al Mohandes, en un bombardeo selectivo de Estados Unidos el 3 de enero, en Bagdad. En represalia, Irán atacó una semana después con misiles una base militar con presencia de soldados estadunidenses en Irak, lo que estuvo a punto de derivar en un conflicto directo entre Teherán y Washington. A mediados del pasado febrero, el jefe del Poder Judicial de Irán, Ebrahim Raisí, ya adelantó que estaban trabajando con Irak para llevar a instancias judiciales internacionales el asesinato de Soleimaní.
Con información de Milenio