Laura Karen Espíndola dijo sentirse arrepentida por haber hecho pensar a su familia que estaba en una situación de riesgo, cuando en realidad se encontraba en un bar.
A casi 24 horas de haber regresado a su casa en la colonia Villa Coapa, en Tlalpan, Laura Karen acudió ayer por la mañana a rendir su declaración ante la Fiscalía de personas Desaparecidas de la Procuraduría capitalina, acompañada de policías de investigación y familiares, sin hacer públicas las justificaciones de porqué estuvo todo el tiempo de búsqueda en un bar a 800 metros de su casa.
Fuentes de la Procuraduría General de Justicia (PGJ)que fueron consultadas señalaron que Karen se dijo “arrepentida” por no comunicarse con su madre e informarle que estaba bien.
Después de esta diligencia realizada aproximadamente a las 11:00 horas, la mujer recostada sobre el asiento trasero de una patrulla, viajó con su madre.
La PGJ confirmó que la mujer acudió a las instalaciones de la dependencia ubicadas en avenida Jardín, en Azcapotzalco.
Su hermano Daniel admitió equivocarse al confiar en su hermana y respondió a los cuestionamientos que le hacían en redes sociales.
“ Aun sabiendo que me equivoqué en confiar en mi hermana, pero no me equivoqué en hacer todo mi esfuerzo para que no fuera la última vez que la vería con vida. Tantita empatía”, escribió vía Twitter.