Al presidente estadounidense, Donald Trump, le sorprendió la fuerte polémica generada por su plan de celebrar en su club de golf Trump National Doral la próxima cumbre de líderes del G7, porque “considera que sigue en el negocio de la hospitalidad”, aseguró la Casa Blanca.
“Le sorprendió verdaderamente el grado de polémica” que generó la selección de Trump National Doral, aseguró el jefe de gabinete interino de la Casa Blanca, Mick Mulvaney, quien se encargó de anunciar el pasado jueves la selección del club de golf de Trump como la sede de la próxima cumbre del G7. El sábado, Trump descartó su club como sede del evento.
El anuncio sobre el G7 fue señalado por expertos en ética gubernamental como el ejemplo más flagrante de un posible conflicto de interés.
Trump culpó de la polémica a “la loca e irracional hostilidad de los medios de comunicación y los demócratas”.