Los beneficiarios del programa federal Pensión Universal para Adultos Mayores de 68 años y Más ya no saben a qué instancia recurrir por la notoria negligencia con la que son atendidos por los servidores de la Nación que están comisionados a la entrega de los apoyos económicos bimestrales a que tienen derecho.
De acuerdo a la queja pública, para poder obtener la citada pensión, tienen que recorrer por lo menos dos módulos, debido a la desorganización que prevalece en el manejo de las bases de datos de los beneficiarios, lo que, además de causarles pérdida de tiempo, en algunos casos, provoca serias afectaciones en su salud, pues algunos de ellos requieren de aparatos auxiliares para su movilidad.
Los inconformes señalaron que buscaron entrevistarse con la delegada local de Programas Sociales de la Secretaría del Bienestar, Elizabeth Guzmán Argueta, pero en cada ocasión que lo han intentado, se les niega la audiencia por parte del personal de apoyo.