La reunión entre el canciller mexicano Marcelo Ebrard y el vicepresidente estadounidense, Mike Pence, para evaluar los avances mexicanos en el esfuerzo por frenar el flujo migratorio a Estados Unidos se llevó la tarde del martes en la Casa Blanca.
Ebrard llegó con el mensaje de que México redujo en 56% la inmigración no autorizada desde el pico de mayo pasado. El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, había amenazado con imponer aranceles a las importaciones mexicanas a menos de que las autoridades mexicanas hicieran más por detener a los migrantes.
Vía Twitter, Ebrard anunció poco antes del encuentro que si bien el tema para Estados Unidos sería la migración, para México lo será «congelar tráfico ilícito de armas a nuestro país».
En el encuentro, además de Pence, están presentes el secretario de Estado, Mike Pompeo, y el nuevo embajador de Estados Unidos en México, Christopher Landau.
El lunes, Estados Unidos advirtió que si bien México ha hecho esfuerzos «sin precedentes» y admitió una caída en la detención de migrantes en su frontera sur, se requería «más».