La gran labor del bibliotecario Mauricio Méndez encargado del campamento de verano para alumnos con discapacidad visual en la Biblioteca Benito Juárez, se vio reflejada en el aprendizaje de sus alumnos y culmina este viernes.
Este campamento tuvo características especiales ya que incluso se recibió a adultos con debilidad visual o con discapacidad visual, quienes también realizaron manualidades.
Martha Beatriz Córdova Bernal, directora de Educación, señaló que los bibliotecarios implementan de acuerdo a sus habilidades o conocimientos diversas actividades para enriquecer su labor y tal es el caso de Mauricio Méndez quien tiene años impartiendo el taller para personas que padecen ceguera.
Los niños, jóvenes y adultos que acudieron tuvieron enseñanzas sobre el diario vivir para adaptarse incluso al uso de teléfonos, aplicaciones para personas con discapacidad visual, desplazarse sin problema, actividades para despertar los sentidos del tacto, oído, vocal aunado a la gran sensibilidad de los estudiantes, la guía del bibliotecario fue fundamental.
Mauricio quien se desempeña cotidianamente como bibliotecario, muestra como desenvolverse en un mundo que está preparado para los que gozan del sentido de la vista pero no para quienes no, ya que se desempeña cotidianamente como empleado municipal en el área de bibliotecas y ocupa su tiempo y esfuerzo para ayudar a personas que viven en la misma condición.
Ha implementado el taller de lectura Braille en la Biblioteca Benito Juárez donde enseña cotidianamente a personas este conocimiento que abre las posibilidades de inclusión a personas con discapacidad visual.
Los servicios que Mauricio realiza son totalmente gratuitos para la ciudadanía y hace una invitación para que las familias que tienen un miembro en esta condición lo lleven a la Biblioteca para recibir el apoyo del bibliotecario.
La Biblioteca Benito Juárez se encuentra ubicada en la avenida Sanders 347 en la colonia Rastro, en donde se ubicaba el llamado “rastro viejo”.