Familiares y amigos dieron el último adiós a Óscar Alberto Martínez y su pequeña hija Angie Valeria, quienes murieron ahogados al intentar cruzar el Río Bravo, y ahora sus restos descansarán en el panteón La Bermeja, en su natal El Salvador.
Entre flores y vestimentas de luto, unas 50 personas acompañaron la carrosa fúnebre que transportaba los restos mortales del hombre de 25 años, y de la menor de casi dos años de edad, cuyos cuerpos fueron rescatados el 24 de junio.
Los asistentes se dieron cita la ciudad de Altavista de donde partieron, Oscar junto con su hija y su esposa Tania, el pasado 3 de abril en busca de mejores condiciones de vida, para acompañar a la familia en una ceremonia privada.