El gobernador dijo que su gobierno inició, en coordinación con la federación, una nueva estrategia que llevará al cierre del proceso de extradición de su antecesor César Duarte.
En entrevista con medios en la Ciudad de México, señaló que ha sostenido reuniones de trabajo con los titulares de la Fiscalía General de la República, Alejandro Gertz Manero, y de la Secretaría de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, quienes le han confirmado su colaboración para que este caso no quede impune.
Indicó que se harán las gestiones adecuadas y correctas para no dilatar más el proceso de extradición, en función de que durante el sexenio federal anterior, hubo un manoseo en la forma en que fueron administradas las órdenes de aprehensión.
De acuerdo con la Consejería Jurídica del Gobierno del Estado, sobre Duarte existen 15 órdenes de aprehensión relacionadas con el delito de peculado y por las cuales se requiere su presencia en la entidad.
“Lo que sí les puedo asegurar, es que por parte del gobierno de Estados Unidos, nos han confirmado que México ha expresado con claridad, su voluntad para traer a Duarte a los tribunales del estado de Chihuahua”, afirmó el mandatario estatal.
Consideró que el proceso se dará durante los meses siguientes, gracias a que se acabó la protección al ex gobernador, “ya no hay manera de que se salve”, agregó.