Irene Vega, alumna del Programa de Derecho de la UACJ, fue una de las dos estudiantes mexicanas que participaron en la Asamblea General de Líderes Mundiales en la Organización de las Naciones Unidas (ONU), que se llevó a cabo en Nueva York los días 29, 30 y 31 de marzo.
Irene estudia actualmente el octavo semestre de la Licenciatura en Derecho y fue aceptada a participar en esta Asamblea General de Líderes Mundiales, luego de haberse preparado en temas de política internacional relacionados con la proliferación de armas de destrucción masiva y el reclutamiento de niños en conflictos armados, principalmente.
Además, Irene debió atender entrevistas rigurosas para que pudiera ser invitada a participar en este evento internacional en el que participaron jóvenes de prácticamente todo el mundo.
Dijo que ha sido una experiencia muy importante por haber viajado a una de las ciudades más importantes del mundo y asistir a la sede de la Organización de las Naciones Unidas que le permitieron conocer los procedimientos y protocolos que deben seguir los representantes de los países afiliados a la ONU.
Indicó que tuvo que prepararse en temas sobre la posición de México ante determinados temas como el de la oposición a que sean reclutados niños como soldados en conflictos armados como sucede en Israel y Sudán del Sur. También en temas como el de la proliferación de armas biológicas, nucleares y químicas.
En las sesiones en las que participaron, que llegaron a tener una duración de 8 y hasta 12 horas, se tenía que asumir una postura igual a la que adopta el país de origen, en su caso México, para proponer alternativas de solución.
Indicó que su compañera de delegación fue una estudiante de la Universidad Nacional Autónoma de México.
Irene Vega dijo que el proceso para asistir a esta asamblea de la ONU se inició cuando realizaba una estancia de intercambio estudiantil en la Universidad La Salle, en la Ciudad de México y una vez que fue aprobada su participación, la ONU le indicó que la organización solamente podría proporcionarle el acceso a la sede, pero tanto su traslado a Nueva York como su hospedaje y alimentación tenían que correr por su cuenta.
Dijo que solicitó apoyo y la Universidad le proporcionó los boletos para el viaje y su hospedaje durante los días que permaneció en la ciudad norteamericana.
Indicó que la experiencia de haber participado en una asamblea de líderes mundiales de la ONU le ha despertado el interés por el derecho internacional. Originalmente tenía atracción hacia la filosofía del derecho, pero ahora comparte el interés por el derecho internacional.