Hay personas que deben pasar solas los días festivos porque sus empleos no les permiten descansar. Tal es el caso de la azafata estadunidense Pierce Vaughan, quien tuvo que laborar la víspera y el día de Navidad.
Para evitar que su hija se sintiera sola esos días, su padre, Hal, compró pasajes para todos los vuelos en los que ella estaría: en total 6.
Un pasajero que se sentó junto al amoroso padre escuchó la historia con atención y le pareció tan emotiva que decidió compartirla en sus redes sociales.
Tuve el placer de sentarme al lado de Hal en su vuelo de regreso a casa. Su hija Pierce era nuestra azafata, quien tuvo que trabajar en Navidad. Hal decidió que pasaría la fiesta con ella, por lo cual está volando en cada uno de sus vuelos hoy y mañana en todo el país . Se trata de un padre fantástico», señaló Mike Levy.
Un agradecimiento especial a todos los pacientes y maravillosos agentes de vuelo en todo el país y a mi equipo perfecto. Él estuvo en todos los vuelos e incluso consiguió el RSW-DTW (milagro de Navidad) de primera clase».