En abril de 2014, Cuauhtémoc Gutiérrez de la Torre, cuando era dirigente del PRI en la CDMX, fue acusado de operar una red de prostitución, donde se evidenció testimonios de víctimas y de una reportera anónima que se infiltró en las oficinas de ese partido político, por lo que el hombre se vio obligado a dejar el cargo en medio de denuncias y escándalos.
Pero después de cuatro años, Sandra Esther Vaca Cortés, a quién acusaron de reclutar mujeres jóvenes para la red de prostitución de Gutiérrez de la Torre, tomó protesta esta tarde como diputada local del PRI en la Primera Legislatura del Congreso de la Ciudad de México.
Según el trabajo de la reportera infiltrada, Vaca Cortés era secretaria particular de Gutiérrez de la Torre y junto con Claudia Priscila Martínez González, -otra trabajadora del entonces líder del PRI- eran los filtros para reclutar a las jóvenes que pedían trabajo como edecanes, secretarias o auxiliares administrativas.
Sandra Esther logró la curul luego de que la diputada electa del PRI, Edna Mariana Gutiérrez Rodríguez, pidió licencia al cargo, con el argumento de que “así convenía a sus intereses personales”.
